lunes, 17 de diciembre de 2012

TIEMPO PARA INNOVAR

A los responsables de las organizaciones les cuesta ver la importancia que tiene la inversión de TIEMPO en tareas relacionadas con la innovación.

Esperan que de alguna manera las personas realmente válidas ya se las apañarán para generar ideas, investigar, recopilar datos, generar nuevos modelos de negocio, gestionar proyectos, prototipar, resolver problemas ... entre sus otras tareas.


Este enfoque no es razonable, es injusto, desequilibrado e inviable.

Esta forma de actuar propicia que muchos proyectos se queden a medio terminar y lo que es peor, generan malestar y cabreo en las personas.

Los innovadores no necesitan palabras de ánimo, lo que necesitan es tiempo. Tiempo para pensar,  soñar, colaborar, planificar, probar, jugar y ejecutar.

Iniciativas como las de Google, que da a sus ingenieros el 20% del tiempo de trabajo para desarrollar proyectos propios que no tienen que estar relacionados con su negocio principal, son ejemplos de dedicación tiempo a la innovación.

W.L. Gore promueve que medio dia de la jornada laboral a la semana se dedique a temas que fascinen a sus empleados.

Preguntaron en una entrevista a Edward de Bono ¿Dónde se encontrará el petroleo en el siglo XXI? Contestó diciendo, "justo debajo de los pies de cada empleado que esté fascinado por el trabajo que realiza, alineado con la misión de su organización y con el tiempo suficiente para hacer que ocurra la magia".

Todo este planteamiento choca de frente con el miedo que produce dar "libertad" a las personas... que terminarán jugando al mus o almorzando durante horas.... la visión quedará por tanto suplantada por la supervisión y todos sus acólitos de la microgestión.

Hay que recordar una vez más que las organizaciones no innovan, lo hacen las personas, y estas necesitan tiempo y libertad para poder elegir, explorar, expresar e incluso tiempo y libertad para fracasar.

6 comentarios:

  1. El tiempo...
    "la visión suplantada por la supervisión y acólitos de la microgestión". Una batalla a pelear con los clientes para que dejen tiempo a los innovadores (incluso hay que vigilar para que no se impacienten con lo que está en marcha).
    Y como pyme un reto interno para racionalizar, organizar y poner en línea esa desidiosa parte de gestión con los proyectos de futuro, que muchas veces son incompatibles ya no por tiempo sino por concepto. O al menos aparentemente, ese es el conflicto que hay que superar reflexionando con calma para encontrar nuevas fórmulas.

    Muxuat!!

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    1. Recurrimos en muchas ocasiones a escusarnos en este recurso ta finito. Se nos olvida a menudo que es imprescindible para idear nuevas opciones, acometerlas y poder consolidarlas...

      Feliz día, Sabela!

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  2. Hablas de miedo a dar libertad en las organizaciones.
    Nosotros vivimos falta de confianza en la nuestra.

    En una escuela donde deben impartirse clases, las horas complementarias carecen de sentido (las clases hay que prepararlas sí o sí, en el puesto de trabajo o en casa)
    En nuestra organización la preparación de las mismas pasa a segundo plano, lo que cuenta es cumplir el horario, permanecer en el centro el tiempo pactado.

    En este momento, estoy cumpliendo con mi contrato. ;-))

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    1. Cuando se trata de poner encima de la mesa el talento y la pasión de las personas, es absurdo recurrir a la supervisión como garante de de obtención de resultados.

      Es cierto que muchas organizaciones doptan la microgestión como base de su funcionamiento y así les va!!

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  3. La organización te marca el horario. Tú dispones de tu tiempo.
    El tiempo que tarden las organizaciones en asumir y gestionar esta realidad es, qué despilfarro!!, tiempo perdido.

    Te decía hace un rato en otro espacio que no sabía que pedirle a Olentzero.
    Tiempo. Ese sería un buen regalo!! ;)
    Mientras llega, cuidaré mucho el que ya tengo y lo aprovecharé y lo disfrutaré al máximo.

    En nuestro caso, con una carga lectiva de 28 horas semanales y tres complementarias, una de ellas guardia y otras dos para reuniones, es fácil deducir de dónde sacamos ese precioso tiempo los profesionales que sentimos implicación y compromiso con nuestra labor diaria.

    La parte positiva es que el deseo y la posibilidad de innovación acompañan a la persona a tiempo completo, si quiere. Y esa es la parte con la que yo me quedo. Porque no quiero dejar en esas manos mis posibilidades, mucho menos mis deseos.

    Porque "una hace lo que quiere".
    Me lo ha dicho hoy un mago que va por la vida sin reloj!!

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    1. Soy partidario de que los esfuerzos aún siendo en temas apasionantes sean sostenibles en el tiempo. Cuando afronto una maratón (ya lo he comentado por aquí alguna vez), trato de que el primer tercio de la carrera la lidere la cabeza, el segundo tercio las piernas y la última el alma.

      Me gusta ese mismo enfoque para los proyectos, que al igual que las maratones necesitan mucho TIEMPO de dedicación y preparación.

      Totalmente de acuerdo con el Mago "Una hace lo que quiere".

      Te cuento un secreto, creo conocer el truco que utiliza para conocer la hora sin reloj... no se despega de su Iphone ;-)!!

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