Continúo y acabo con las recomendaciones para la redacción de desafíos provocadores que inicié en esta entrada y proseguí en esta otra .
f.- Metáforas.
La metáfora es una figura retórica que consiste en denominar, describir o calificar algo a través de sus semejanza o analogía con otra. Ejemplo:
¿Cómo podemos garantizar que el producto que salga de nuestra cadena de montaje, funcione como un reloj Suizo?.
g.- Humor.
El humor es una herramienta muy potente para activar la creatividad, pero ojo, puede tener su lado oscuro.
Muchas personas no son tan divertidas como ellas creen. El humor mal empleado puede ser ofensivo y si se utiliza de manera inadecuada los resultados pueden ser desastrosos.
Hay expresiones que pueden ser abusivas, racistas, sexistas ... o aunque no lo fueran, pudieran interpretarse así.
Lo que puede parecer gracioso para un grupo de hombres ejecutivos ricos, puede ser burdo u ofensivo para un grupo de mujeres de servivios de limpieza.
Dicho esto, el humor es muy eficaz para provocar el pensamiento creativo.
Las personas se relajan con el humor y esto permite que las ideas fluyan con facilidad, además disminuye el miedo que suele atenazar las propuestas que pueden parecer "locas".
Utilizar una o varias de las propuestas que he mencionado en esta trilogía, puede ayudar a que los retos o problemas que se planteen a un equipo de trabajo obtengan más y mejores resultados creativos.
Hay que invertir mucha energía creativa para la elaboración de retos importantes y provocadores, y este es un hecho que a menudo menospreciamos o no tenemos en cuenta.
Hola Paulino!
ResponderEliminarCiertamente la mente es una criatura metafórica y el humor es signo de inteligencia. Aunque todo es su dosis justa, como bien dices.
Un abrazo!
El juego es una herramienta muy importante para el aprendizaje, pero además tiene virtudes como la de ser facilitador para la expresión de emociones...
ResponderEliminarEl humor creo que se aproxima al juego en cuanto a la capacidad que tiene de generar sensaciones "parecidas"...
Eso sí existen muchas categorías de humor... inteligente, gracioso, negro, facilón, sexista, racista, grosero, bruto...
La cuestión como siempre está, en emplear adecuadamente las virtudes de esta "herramienta" tan especial.
Un fuerte abrazo, Isabel!!